Tom Hanks denuncia la recreación de su imagen con Inteligencia artificial sin su consentimiento
Escrito por Boris Bueno Camacho el 2 de octubre de 2023
Se trataría de campaña publicitaria para un plan dental que creó un deepfake del actor.
Tom Hanks, el renombrado actor de Hollywood, ha vuelto a poner sobre la mesa la creciente preocupación en torno al uso de la inteligencia artificial en la industria del entretenimiento. Con más de 9.5 millones de seguidores en su cuenta de Instagram, el ganador del Oscar utilizó esta plataforma para alertar a sus admiradores sobre un anuncio que aparentemente utilizó su imagen para promocionar un plan dental.
Sin embargo, Hanks aclaró que esta imagen era en realidad una creación generada por IA y que nunca otorgó su consentimiento para su uso. El artista incluso publicó una captura de pantalla del anuncio, en el que se le ve más joven de lo que es actualmente, y advirtió que no tiene “nada que ver con eso”.
A este método se le conoce como deepfake, y consiste en manipular vídeos o imágenes mediante algoritmos de aprendizaje automático para cambiar el rostro, la voz o el movimiento de una persona. De hecho, según el medio Peta Pixel, el anuncio fue creado con una herramienta de inteligencia artificial que anima fotografías estáticas y la imagen original pertenece a una entrevista que el actor concedió a Los Ángeles Times.
Tom Hanks y sus preocupaciones sobre la IA
Esta no es la primera vez que Tom Hanks expresa su inquietud sobre el impacto de la IA en el mundo del cine y la televisión. Durante una conversación en el podcast del comediante británico Adam Buxton, el actor compartió sus preocupaciones sobre cómo esta tecnología tiene la capacidad de manipular y replicar rostros de manera extremadamente realista.
En sus propias palabras “lo vimos venir. Vimos que iba a existir la capacidad de tomar ceros y unos dentro de una computadora y convertirlos en una cara y un personaje. Desde entonces, eso solo se ha multiplicado por mil millones y lo vemos en todas partes”.
Una de las principales preocupaciones en la industria del entretenimiento es cómo la inteligencia artificial podría permitir que versiones falsas de actores continúen actuando de manera indefinida, incluso después de su desaparición. De hecho el mismo Hanks aseguró que “mañana podría ser atropellado por un autobús, pero mis actuaciones pueden seguir y seguir; y fuera del entendimiento de que se ha hecho con IA o deepfake, no hay nada para decir que no soy yo”.
La controversia sobre el uso de la inteligencia en el entretenimiento ha cobrado relevancia en medio de la huelga de escritores estadounidenses, que recientemente llegó a su fin. Una de las principales áreas de conflicto durante esta protesta fue la preocupación de que la IA, sin regulación, pudiera socavar el trabajo de los creativos.
Cómo Funciona el Deepfake
Los deepfakes se crean mediante algoritmos de aprendizaje profundo que utilizan redes neuronales artificiales para analizar y sintetizar datos de entrenamiento. En el caso de videos, estas redes pueden aprender las expresiones faciales, la voz y otros rasgos distintivos de una persona a partir de una gran cantidad de material de origen, como fotos y videos existentes.
Una vez que el algoritmo ha aprendido estas características, puede aplicarlas a un nuevo video o audio para crear la ilusión de que la persona está diciendo o haciendo algo que nunca ocurrió.
Consecuencias del Deepfake
El auge de los deepfakes ha generado preocupación y debate debido a sus potenciales consecuencias negativas:
Desinformación: Los deepfakes pueden utilizarse para crear videos que parecen mostrar a figuras públicas diciendo o haciendo cosas vergonzosas o falsas. Esto puede contribuir a la desinformación y socavar la confianza en la información auténtica.
Engaño: Esta tecnología puede ser utilizada para crear suplantaciones de identidad convincentes, lo que plantea riesgos de fraude y engaño. Por ejemplo, alguien podría hacer que parezca que otra persona está pidiendo dinero prestado o compartiendo información confidencial.
Manipulación política: Los deepfakes pueden ser utilizados en campañas políticas para difamar a candidatos o crear videos falsos que influyan en la opinión pública. Esto representa un riesgo para la integridad de los procesos democráticos.
Acoso y difamación: Las personas pueden convertirse en víctimas cuando sus rostros o voces se utilizan en videos manipulados de manera difamatoria o degradante, lo que puede tener graves consecuencias emocionales y sociales.
Privacidad violada: Los deepfakes pueden ser utilizados para crear contenido íntimo falso que viola la privacidad de las personas. Esto plantea cuestiones éticas y legales en torno a la seguridad de la información personal.
Difuminación de la línea entre la realidad y la ficción: El uso generalizado de deepfakes podría llevar a una sociedad en la que sea cada vez más difícil distinguir entre lo que es real y lo que es falso, lo que tiene implicaciones profundas para la confianza en la información y la comunicación.
(Fuente: infobae)