La golpiza a Cruz hace reflotar las acusaciones de separatismo y racismo
Escrito por Boris Bueno Camacho el 11 de junio de 2023
Tras la golpiza que recibió la asambleísta departamental Muriel Cruz (MAS), el MAS acusa de “separatismo, racismo, matonaje político”, entre otros, a grupos radicales cruceños y activa el Mecanismo de Prevención y Atención Inmediata de Defensa de los Derechos de las Mujeres en Situación de Acoso y/o Violencia política.
La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, rechazó de forma enérgica la violencia ejercida contra la autoridad departamental y solicitó “realizar una investigación y tomar las acciones correspondientes que se han estado realizando”, y aplicar el mecanismo de prevención que establece el DS 2935.
Está instancia, integrada por representantes de los ministerios de Justicia y de Gobierno, además del Viceministerio de Autonomías, del Órgano Electoral, del Ministerio Público, de la Defensoría del Pueblo y de la Policía Boliviana, fue convocada a una reunión para el miércoles 14 de junio.
Matonaje político
El vocero presidencial, Jorge Richter, calificó de “matonaje político” la agresión que sufrió la asambleísta Cruz. Dijo que estas actitudes tienen como finalidad atemorizar y mostrar el desprecio hacia los sectores populares.
Agregó que la Asamblea Legislativa Departamental cruceña construye una narrativa para deslindar responsabilidad y culpar de los hechos a la Policía y a gente infiltrada.
Separatismo
El líder del MAS, Evo Morales, en su cuenta de Twitter al expresar su solidaridad con Cruz, responsabilizó del hecho violento a la presidencia de la ALD de Santa Cruz.
“La agresión brutal contra la hermana #MurielCruz demuestra el comportamiento criminal de grupos irregulares financiados por una oligarquía racista y separatista que opera impunemente desde la presidencia de la Asamblea Departamental y la Gobernación de Santa Cruz”.
Puntos de vista
Vladimir Peña
No cabe justificaciones, excusas ni atenuantes: fue acto de barbarie, que debe erradicarse. El país debe aislar a los violentos y extremistas que piensan que todo vale. Es momento de desintoxicar la política.
Samuel Doria Medina