Exmagistrado teme que prórroga de autoridades judiciales se extienda hasta que políticos logren perpetuarse en el poder
Escrito por Boris Bueno Camacho el 13 de diciembre de 2023
“Se han quedado para seguir haciendo lo que han hecho bien seis años: servir al poder político, no servir al pueblo boliviano”, opinó Antonio Baldivieso
El exmagistrado del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) Antonio Baldivieso advirtió anoche que la prórroga de mandato autorizada por la declaración constitucional 49/2023 emitida ayer se extenderá hasta que la clase política se sirva del Órgano Judicial para conseguir perpetuarse en el poder.
Dijo que uno de los temas más preocupantes de la cuestionada sentencia es que cierra puertas a cualquier otra vía para la elección de sustitutos una vez que los magistrados cumplan su mandato este fin de año y condiciona su reemplazo a la elección por voto de nuevas autoridades judiciales, lo que en su criterio podría extenderse un año o más, tomando en cuenta los antecedentes que demoraron este proceso y las condiciones también definidas por el TCP, como la aprobación de la convocatoria por dos tercios de voto de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
Luego agregó: “En otras palabras, nos queda un largo camino por recorrer, con nuevas acciones constitucionales, con nuevas consultas, nuevas trabas y obstáculos, seguramente, para que las elecciones judiciales, con buena suerte, se realicen el 2025, cuando ya el Tribunal Constitucional y el sistema de justicia hayan servido a la clase política para perpetuarse en el poder”.
En interpretación del exmagistrado, la decisión que adoptaron los miembros del TCP no es inconstitucional, pero sí es anticonstitucional e ilegítima, ya que, si bien el fallo de este organismo constitucionaliza la prórroga, porque esa es la facultad conferida al TCP, lo hace en contra del poder constituyente que determinó en la Constitución que el mandato de las autoridades judiciales es sólo de 6 años.
“Entonces, el Tribunal Constitucional puede declarar la constitucionalidad de lo que sea, de lo que se le ocurra. La democracia confía en el guardián de la Constitución, el único mandato del Tribunal Constitucional es hacer prevalecer la Constitución sobre las ambiciones políticas, sobre las decisiones del poder político que siempre está rayando en lo anticonstitucional, y lamentablemente nuestro Tribunal Constitucional hace ya muchísimo tiempo ha dejado de ser el guardián de la Constitución y ha dejado de cumplir esos mandatos constitucionales”, reflexionó
En criterio de Baldivieso, un eventual juicio de responsabilidades es poco probable, ya que ello depende de que haya dos tercios de voto en la Asamblea Legislativa Plurinacional, lo que en su criterio no será posible. “Además, los magistrados prorroguistas cuentan pues con la protección política del Gobierno. Naturalmente, si se han quedado, se han quedado para seguir haciendo lo que han hecho bien seis años: servir al poder político, no servir al pueblo boliviano”.
(Fuente: eju.tv)
