A casi un mes del doble infanticidio, Patricia vive un calvario y cuenta cómo ocurrieron los hechos
Escrito por Boris Bueno Camacho el 2 de abril de 2024
La madrugada del 5 de marzo, los hermanitos Daniel y César perdieron la vida a manos de su padre, quien también intentó asesinar a su expareja. Patricia comentó a Urgente.bo que vive un calvario desde la muerte de sus pequeños hijos.
A casi un mes del doble infanticidio, ella no encuentra consuelo alguno, trata de llevar su vida con normalidad, pero los recuerdos se hacen presentes y no puede dejar de pensar en sus bebés. Las heridas por las apuñaladas que recibió sanan y tiene cicatrices en diferentes partes de su cuerpo, pero ‘las heridas en el corazón’ por los recuerdos se mantienen intactos.
“De salud, si estoy bien, las cicatrices están en todo mi cuerpo, en mi cuello. No me di cuenta en que momento me corto toda la parte de la nuca. (…) En los videos se observa que él me dio muchas puñaladas en la espalada, a nivel de los pulmones y los riñones. Yo tenía que ser la primera muerta esa noche”, mencionó Quispe a Urgente.bo.
Algunos días sufre de ansiedad y depresión, por lo que continúa medicada. Patricia llama una experiencia de terror la que le tocó vivir, pero saca fuerzas de donde no tiene para proponer leyes que endurezcan el delito de infanticidio y que la muerte de sus hijos no sea en vano.
“Es muy difícil para mí porque los tres vivíamos solitos, eran y son mi vida entera. Está siendo muy difícil porque me llegan momentos de ansiedad, de depresión, me tapo con la almohada y grito”, indicó.
Quispe estaba separada con Cesar Tezanos Pinto, hace dos años, tiempo en el que atravesaron distintos problemas judiciales por la custodia de sus hijos, pero en los últimos meses antes de la tragedia trataron de llevar una relación de amistad “por los niños”. Nunca se imaginó que este hombre asesinaría a sus pequeños.
La noche del lunes 4 de marzo, Cesar ingresó al domicilio de Patricia con una pizza y bebidas alcohólicas con el pretexto de compartir los alimentos con sus hijos. Horas después, con un cuchillo de cocina atacó a su hijo menor, Cesarito, luego atentó contra su expareja, quien trataba de evitar que sus hijos sean asesinados, pero no pudo contener al hombre, quien finalmente logró terminar con la vida de los dos niños.
“A Cesarito le hace un corte, pero después es a mí a quien primero la ataca con el segundo cuchillo que trae de la cocina. Físicamente, estoy muy desanimada, me anima esto del cabildo porque será por los bebés, pero muchas veces pienso ‘era que yo también me vaya con ellos’”, dijo Quispe con la mirada perdida.
Según Patricia, horas antes de que ocurra el crimen no hubo ninguna discusión entre ambos padres, el hombre atacó a los niños sin razón. Ella sospecha que el crimen fue planeado.
“Nunca discutimos, nunca hubo discusión, él llegó superbién, los bebés lo recibieron saltando porque trajo pizza, no había discusión, estábamos charlando y me pidió una chamarra, fui por la chamarra y de repente saltó, estaba sobre Cesarito cortándole, fue así. Todo estaba planeado”, sostiene.
El infanticida habría confesado a Patricia su intención: “‘El plan era que tomes, te emborraches y te duermas para que yo pueda hacer todo tranquilo’. Tal vez (quería que embriagarme) para poner pruebas, inculparme y cortar las cámaras”, dijo.
LAS CÁMARAS DE SEGURIDAD FUERON LA CLAVE
Patricia dice que Cesar pretendía culparla por el doble infanticidio e incluso le pidió que lo asesine porque él no pudo hacerlo, sin embargo, las cámaras de seguridad fueron clave para determinar quién fue el verdadero autor. “Se hizo cortes y cuando ya ocurrió todo me quiso dar el cuchillo y me dijo ‘Pati no me pude matar, toma mátame’ quería que mis huellas esté en el cuchillo, pero yo solo baje y grite”, explicó.
“Ahora las cámaras son la clave para todo. Él tenía toda la intención de culparme a mí de lo que había hecho, pero yo jamás”, añadió.
Al lugar llegaron la hermana y el cuñado de Patricia. Su cuñado fue en busca de una patrulla policial al Regimiento Tres de Satélite, ya que no se aproximaban ante el llamado. “Llamamos más de 10 veces, pero no venían”.
Los padres y la nueva pareja de Cesar también llegaron al lugar de los hechos, según Patricia pretendían llevarse al infanticida. En todo ese transcurso el hombre se hizo al muerto, pero escuchó la voz de sus padres y se levantó al parecer para huir.
“Mi hermana le pregunto a Cesar y le dijo ‘Cesar que has hecho’ y el Cesar le respondió ‘yo no he hecho nada, tu hermana’. Él tenía todas las ganas de culparme a mí”, lamentó Quispe.
Patricia y su hermana forcejearon con los padres de Cesar para que este no salga de la habitación, hasta que finalmente llegó su cuñado con la Policía.
“La chica Cielo entró a mi cuarto a ver a mis bebés muertos y ella siendo médico no dijo nada, yo estaba toda sangrando también, lo único que hicieron era entrar, alzarlo a Cesar. (…) Yo sangrando de mi cuello, me pare en la puerta y dije no sale nadie, su papá empezó a jalonearme a pesar de que estaba sangrando y mi hermana lucho con la mamá y esta chica. (…) Querían sacarlo de la casa si o si”, relata.
UNA SEMANA ANTES DEL DOBLE INFANTICIDIO
El hermano de Patricia murió una semana antes de que mueran sus hijos, ella tuvo que dejar a sus niños a cargo de su padre para evitar que estén en un ambiente del velorio y entierro.
El lunes 4 de marzo los regresó con su madre y por la noche volvió con pizza para compartir con ellos. Patricia presume que esa semana algo paso en casa de Cesar para que él tome la decisión de matarlos.
“En esa semana los tenía a los bebés, no sé si en esa semana se cansó, dejo de tener el apoyo de sus papás porque los tenía toda la semana a los bebés, pero cuando me los devolvió, inmediatamente procedió hacer esto. Una semana los tuvo, ese lunes me los entregó y ese lunes ocurrió todo”, sostuvo.
AMPLIAR LA DENUNCIA
Patricia sospecha de que la nueva pareja de Cesar está involucrada en el hecho, ya que habría mandado un mensaje a otra persona donde le decía que faltaba un gran golpe.
“Los bebés me decían que estaban con una tercera persona, Cielo decían. Hubo un mensaje que mando ella, tenemos la captura, donde habla de mí y dice ‘todavía falta el gran golpe, paciencia’, no sé a qué se refería, no sé si este fue el gran golpe”, añade.
Sin embargo, Patricia dice estar cansada de realizar procesos, ya que anteriormente la familia de Cesar la traía de juzgado en juzgado.
“Estamos en esas conversaciones con todos los abogados que estamos, pero es algo que van a decir los abogados, mi familia también porque yo estoy muy desanimada para hacer algo más, me han tenido juzgado tras juzgado estando con los bebés y ahora lo mismo”, dijo con un rostro de tristeza.
Anteriormente, presentó una denuncia, pero la fiscal Selma S. Yapu L. determinó el sobreseimiento al caso. Según el fiscal Departamental de La Paz, William Alave, porque la madre habría presentado una prueba falsa, versión que es negada por Quispe.
“Con ese delito y no sé por qué otro más me tenían chantajeada. Lo que dije en mi declaración del certificado médico, yo tengo muchos amigos médicos y hubiera pedido que me pongan 20 días de impedimento. (…) Esa vez entramos a una clínica, Cesarito tenía seis meses y no paraba de llorar, nos dio el certificado, lo metí en el folder y nos fuimos a casa”, explicó.
Patricia afirmó que en esa ocasión no sufrió una extrema violencia, pero sí la existió. “Cesar, toda mi familia, su familia y yo sabemos que es cierto, realmente si me lastimo ese día que se fue y de la violencia psicológica que siempre hubo. No solo en esa denuncia se basó el certificado médico porque no era reconocido por el forense, había otras pericias”, indicó.
Además, señala que el sobreseimiento de su caso salió en dos semanas, cuando según abogados para que el caso sea sobreseído tiene que pasar al menos seis meses, considerando los que están en lista de espera. Ella presume un tráfico de influencias.
“Lo raro es que, para hacer un sobreseimiento, lo que me comenta mis abogados es que tiene que pasar medio año, eso ocurre en los casos normales, pero a él le dieron en dos semanas, habiendo tantos casos en La Paz que están en filas. Yo supongo que hubo tráfico de influencias, porque estás conclusiones tardan varios meses”, sostuvo.
semanas, habiendo tantos casos en La Paz que están en filas. Yo supongo que hubo tráfico de influencias, porque estás conclusiones tardan varios meses”, sostuvo.
CABILDO EN CONTRA DE LOS INFANTICIDIOS Y DEFENSA DE LOS NIÑOS
El próximo 9 de abril Daniel cumpliría 5 años y Patricia eligió es fecha para convocar a un cabildo en protesta por todos los niños, niñas y adolescentes que murieron a manos de sus padres en el país y también para proponer leyes que endurezcan la pena de los infanticidas.
El cabildo se desarrollará en la plaza San Francisco a partir de las 18:00, pero la movilización descenderá desde la ciudad de El Alto. A la actividad se suman varias asociaciones, instituciones, universidades e incluso un bufete de abogados.
“Agradezco a los que se contactaron conmigo para formular un proyecto de ley, para que haya castigos más ejemplares y que la justicia para los niños sea diferente porque yo note en carne propia que los bebes realmente son indefensos”, dijo.
Según Patricia, la movilización no tiene ningún fin político, ni ideológico, pero busca que las autoridades den sanciones ejemplares a los infanticidas. “Nos tenemos que unir todos por los niños”.
“Los niños corren riesgo en todos lados porque son inocentes, extremadamente inocentes. Yo lo he vivido en carne propia, lo he visto. Necesitamos endurecer las leyes, estamos logrando hacer un proyecto de ley que va a tener el nombre de ‘DACE’ D de Daniel y C Cesarito”, explicó.
Los niños son un sector vulnerable y no pueden salir en manifestaciones para denunciar algún tipo de maltrato. “Alguien tiene que levantar la voz por ellos. Si me quedé en este mundo por alguna razón, yo les invito a ser parte de este cabildo y que llegue a todas partes del mundo que estamos empezando a levantar la voz por los niños, por los bebés”, añadió.
(Fuente: urgente.bo)