EPSAS había garantizado ya el abastecimiento normal del agua hasta al menos febrero de la siguiente gestión, pero estas lluvias que se registran con más frecuencia desde la pasada semana han ayudado a una recuperación de las golpeadas reservas de agua; que resultaron afectadas por las altas temperaturas y demora de la época de intensas precipitaciones.

Ahora, si bien existe una mejora, aún el llamado es persistente a hacer un uso eficiente del recurso, dado que el comportamiento del clima es impredecible y gran parte de las reservas de agua dependen de las lluvias.

(Fuente: La Razón)