Nada detiene a los autos robados en Chile: un vehículo se puede comprar hasta en $us 2.500 en la frontera
Escrito por Boris Bueno Camacho el 31 de julio de 2023
Los vehículos robados en Chile ingresan al país y se mezclan con los motorizados indocumentados en Bolivia.
Pese a los reuniones y compromisos firmados entre los gobiernos de Chile y Bolivia, la maquinaria y el negocio de los autos robados en el vecino país continúa. Nada ha cambiado en la frontera, por donde cada día ingresan de forma ilegal los vehículos, muchos de ellos atracados con violencia, en el país trasandino.
La maquinaria de los autos robados inicia sus operaciones entre los salares de Uyuni y Coipasa. “El contrabando y autos indocumentados es en esa zona, entre el hito 60 hasta el 39”, señaló Andrés (nombre ficticio por seguridad), un comunario que habita en la zona.
Una vez en Bolivia, los vehículos robados se mezclan con aquellos motorizados que están destinados a nunca tener documentación legal en el país.
“Los autos robados son Mitsuhibi Tritón, llevan 2020 y 2021, también hay otros autos pequeños, algunos llevan antiguos y otros más modernos”, señaló Rafa.
Los ‘chuteros’ coordinan con este adolescente, cuando se ejecutan controles de militares para decidir si continúan con su camino. Son jóvenes que no temen a la muerte e internan los autos robados a territorio nacional.
“Los que traen autos robados, recogen por la frontera y pasan por aquí en cinco horas. Me dicen soy de Challapata nada más”, dijo Rafa.
Si hablamos de los vehículos robados que son vendidos en Bolivia, es un negocio lucrativo. En esta parte de Potosí, sumida en la pobreza extrema, llama la atención los videos que los mismos ‘chuteros’ suben a TikTok presumiendo sus autos, viajes y lujos.
Las comunidades fronterizas se vuelven cómplices de lo ilícito, entre las calles de tierra, mezcladas entre casas de adobe y edificios de tres pisos sin revocar, se pueden ver vehículos de alta gama estacionados.
“Se ha definido por lo menos 10 rutas de salida. Una vez ingresan a territorio boliviano, eso se multiplica por otros 10”, manifestó dijo otro comunario.
Un vehículo que en el mercado formal tiene un precio superior a los 30 mil dólares, en las comunidades puede llegar a costar 2.500 dólares; sin embargo, es un vehículo ‘chuto’, muy probablemente robado en Chile.
Sin embargo, cuando el vehículo llega a las grandes ciudades el precio se incrementa y esa ganancia se la queda el ‘chutero’, que pago solo unos pesos a las comunidades para internar el vehículo a Bolivia.
Un secreto a voces fue el que nos contó otro comunario del sudoeste potosino, las comunidades por donde pasan los ‘chuteros’ logran recaudar miles de bolivianos por permitirles el paso por su territorio, y hasta algunas de sus autoridades intentaron legalizar el delito, cobrando impuestos.
“En el semestre habrían recaudado casi 15.000 bolivianos”, señaló otro comunario.
Este negocio también es alentado por la venta irregular de combustible. En medio de la comunidad se logra comprar gasolina subvencionada en bidones, que después es utilizada para dar fuerza a los motores de los autos chutos y robados que circulan en el país.
(Fuente: Unitel)