Iglesia pide no olvidar su labor educativa y una investigación transparente y sin color político

Pronunciamiento de la Asamblea de la Comunidad Educativa de la Iglesia Católica Boliviana. Foto:  CEB

Una investigación transparente y sin color político, además de no olvidar la labor educativa de la Iglesia Católica en el país, es el pedido que hizo este sábado la Comunidad Educativa de la Iglesia Católica Boliviana, dependiente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB). Los miembros de la entidad se reunieron en la ciudad de Cochabamba, desde donde emitieron un pronunciamiento.

“Repudiamos con firmeza todos los acontecimientos ligados al abuso de menores de edad y de igual forma nos adherimos al dolor de todas las víctimas y sus familias. Por ello pedimos que su identidad no sea mellada a través de un bombardeo mediático que genera una revictimización. Solicitamos que estos hechos sean investigados dentro del debido proceso, para la consecución de una justicia transparente sin colores y ribetes políticos o direccionamientos sesgados”, señala el pronunciamiento.

El secretario ejecutivo del área educativa de la iglesia católica, Jorge Fernandez, advirtió que hay un acoso por parte de diferentes grupos en contra de las unidades educativas católicas, privadas y de convenio. Indicó que esto está generando nuevas víctimas, pues en estos establecimientos hay niños y niñas que se ven afectados.

Fernández llamó “al pueblo boliviano en general” a no olvidar la obra educativa que la iglesia católica realiza en todo el territorio nacional, sobre todo en las poblaciones más marginadas, donde este trabajo genera una mejora en la población. Sostuvo que se está trabajando en la evaluación y aplicación de protocolos para evitar que casos como los denunciados vuelvan a ocurrir.

“Como acá estamos los directores de las diversas jurisdicciones, estamos evaluando todo nuestro trabajo y las dificultades en tanto a los protocolos que tenemos. Nuestros protocolos son un poquito anteriores al que el 2019, el Ministerio de Educación sacó. No solo hemos trabajado en la implementación, sino en todo el tema de prevención”, afirmó.

Sobre la llegada del exjesuita Pedro Lima al país, para declarar en el caso de abusos cometidos por el “padre Pica” en el colegio Juan XXIII, Fernández señaló que hubiera sido “interesante” que hiciera estas denuncias antes. Afirmó que es importante valorar la experiencia que tuvo.

“En el caso del señor Lima, es una reflexión institucional que hubiera sido interesante que si él conocía este tema, lo hubiera señalado antes. Es importante valorar lo que él puede aportar a la investigación, tanto a la Iglesia como a la Fiscalía. Pero nos preguntamos ¿por qué no lo hizo antes? ¿por qué se fue a Paraguay?”, cuestionó.

La Iglesia Católica enfrenta una ola de denuncias de abusos y vejaciones sexuales por parte de sacerdotes de distintas órdenes y congregaciones. En La Paz, Cochabamba, Tarija y Chuquisaca aparecen nuevas víctimas y pedidos de justicia y una atención pronta y prioritaria. A este mal momento se suma una arremetida política del Gobierno que ha anunciado acciones como controlar los antecedentes de los curas que ingresen al país; revisar el estatus de los jesuitas en Bolivia e intervenir los colegios que administran.

(Fuente: Página Siete)